martes, 31 de enero de 2012

Disculpa la franqueza

Crees que eso tan maravilloso que un día tuviste es inmortal e imperecedero y que con un poco de buena voluntad y propiciando el ambiente apropiado podrás recuperarlo. Lo siento. No te agarres a la diferencia entre mayormente muerto y muerto en su totalidad. Hay cosas en las que ni el Milagroso Max puede ayudarte.

3 comentarios:

Alástor dijo...

A la gente le encantan los matices y los defectos de forma. También puedes llamarlo clavos ardiendo, o pensar que incluso hay gente que lo hace por un sentimiento de pura ludopatía...
Por cierto, leer de dos personas distintas en el intervalo de una hora la palabra Alapryl me inquietó, lo reconozco. Pero como soy adicto a las adicciones, estoy seguro de que ésta la voy a disfrutar mucho.

Cuinpar dijo...

Alástor, no soy digna de que entres en mi casa, pero ya que viniste, pasa y tómate algo, hombre...
(la otra persona es un copiota, que se copia hasta los ansiolíticos!!!)
Bienvenido

Alástor dijo...

Gracias... pero más bien debería ser al contrario... preguntarme qué afortunada conjunción astral hace que le permitas la entrada en tu casa a alguien que llora con la música de organillo y rellena de gas algo tan inocente como un bombón...
Agradezco tu hospitalidad y, como no puede ser de otro modo, abusaré de ella... ¿Un gin-tonic?